Durante el año pasado acompañamos a Candela Ríos en la búsqueda del chico
del calendario en su serie “Los chicos del calendario”. En su primera entrega vivimos un “Enero" intenso, después llego “Febrero, marzo y abril”, “Mayo, junio y julio”,
“Agosto, septiembre y octubre” y “Noviembre y diciembre” donde descubrimos el
hombre en teoría más perfecto de España.
Hoy en El chico del calendario nos presenta la vida del ganador a partir
de ese momento, un ganador relativo ya que si gano el concurso pero perdió a la
chica. Para aquellos que no hayáis leído
la saga este volumen se puede leer de manera individual dado que a los
protagonistas anteriores se les da un papel secundario.
Víctor, nuestro leñador acepta el
trabajo que le ofrecían en Estados Unidos pero nada le sale a derechas, todo
cambia muy deprisa y acaba trabajando en Nueva York y tras lo que llaman un
incidente acabará compartiendo piso con Jimena, un personaje que ya conocemos,
una gran repostera que siempre ha estado enamorada de Víctor y que en su
momento intento conquistarlo sin éxito.
Víctor es nuestro narrador y
descubriremos lo que siente y todas las vueltas que le da a ello, es demasiado
analítico y lo que necesita es saltar al vacío y confiar en que sus hechos
puedan ser la mejor demostración de sus sentimientos.
Jimena llega con una pesada maleta
cargada de problemas familiares y una coraza en el corazón y aunque para ella
Víctor es especial no quiere dar el paso.
Ambos se niegan a sentir lo que
sienten, ambos están perdidos en sí mismos y necesitan verse reflejados en los
ojos del otro para liberarse.
Para aquellos que os lo preguntéis
Cande se va a casar con quien ya sabéis y le pide a Víctor que sea su padrino y
le deje escribir su historia, un hecho que aviva los recuerdos y grilletes de
su vida pasada.
La prosa es bastante dinámica, la
trama tiene sus altos y bajos, sus momentos irónicos y aquellos que nos hacen
sentir y reflexionar, es una novela corta, un spin-off de lo que fue la serie.
Personalmente no me ha acabado de
atrapar dado que cuando leí la serie el hilo conductor era muy original y esa
parte se ha diluido en una historia romántica entre dos corazones predestinados
a quererse. Supongo que muchos preferiríamos leer sobre Candela y quien le robo
el corazón (no digo quien por si alguien aún no ha leído la serie) o un
spin-off de todos ellos.
Titania nos presenta un volumen que complementa a “Los chicos
del calendario” y aunque hay voces que lo consideran innecesario quizás sea la
manera de reencontrarnos con Candela y su amor por las letras, quizás los otros
chicos del calendario aparezcan en su boda y nos lo cuenten.