Hoy viajaremos a una
pequeña isla donde el tiempo parece haberse detenido, una comunidad que
subsiste básicamente de la pesca, que respira la salazón del mar y suspira en
parte por la modernidad y en parte por la tradición.
Mount Polbearne es un
pueblo donde todos los vecinos se conocen y conviven en harmonía, más o menos,
allí iremos a vivir junto a Polly, una joven que ha perdido su negocio, su
novio, su empresa y que desea poder empezar de nuevo con el poco dinero que le
queda.
Jenny Colgan hornea una deliciosa novela, tierna y crujiente a la vez, llena de los
sinsabores de la vida, de los peligros del mar y del corazón anhelante lleno de
esperanza que enciende el horno de un mundo diferente día a día.
Una autora que nos enamoró
con “Encuéntrame en el Cup Cake Café”, “Navidad en el Cup Cake Café” y “La
chocolatería más dulce de París” ahora regresa a los fogones con La pequeña panadería de la isla.
Esta novela es una obra
coral, donde cada vecino aporta una mirada única sobre el mundo, sobre la vida
y sobre el amor. Polly deberá ganar su lugar en el pueblo y en el corazón de
sus nuevos vecinos.
La vida no es tan
apacible como parece, las noches de los pescadores se rigen por las mareas y
Polly aprende a quererse a sí misma de nuevo y mostrar la cara de una mujer
fuerte contra los contratiempos.
Una vida sencilla que os
arrancará más de una lágrima y a su vez alguna sonrisilla que no podréis
esconder. Polly nos mostrará sus grandes dotes de repostera y panadera, con el
increíble olor de pan recién hecho llegará al corazón de los más indecisos, del
mismo modo que a su corazón llegaran dos hombres, Tarnie, un fornido pescador y
Huckle un apicultor que es mucho más de lo que parece.
Estos dos personajes
marcaran una tónica agridulce en el corazón de Polly y en el de todas sus
lectoras. Quizás el corazón de Polly no esta tan cerrado como ella cree y uno
de ellos pueda devolverle la luz.
Una novela que nos llega
de la mano de Vergara con un mensaje
positivo y un renacer como un Ave Fénix, una historia que como un faro ilumina
los corazones hasta llevarlos a puerto seguro, un lugar entre páginas para
saborear lo bueno de las personas y las opciones que se abren cuando logramos
saltar los obstáculos que se nos presentan en la vida.
En sus últimas páginas
encontrareis las famosas recetas del pan de Polly, solo un aviso, una lectura
adictiva que os hará entrar hambre de tostadas con miel y un buen té.
Absolutamente deliciosa.