Por Maria Valle Viña
Lo
mejor que le puede pasar a un cruasán
es que sea relleno de chocolate, no… lo mejor que le puede pasar es que lo
mojen en café con leche, no, mejor aún en leche con cacao… quizás es mejor que
lo unten de mantequilla o dejarlo secar un poco o ser horneado con un poco de
azúcar o rellenarlo con algo salado… sin duda alguna el título con el que Pablo Tusset ha bautizado su novela no
pasa desapercibido a los ojos de los lectores. Un título suculento y enigmático
para una novela igual de suculenta y enigmática.
Pablo Miralles es el hijo gandul,
procaz y gordo de una familia bien barcelonesa. Una mañana su hermano pijo y
políticamente correcto le hace un encargo aparentemente fácil: localizar al
propietario de una misteriosa casona del barrio, que ha sobrevivido a la
especulación inmobiliaria. Sin embargo, nada más empezar la pesquisa, su
hermano desaparece sin dejar rastro, y Pablo, la oveja negra de la familia, se
verá en la enojosa obligación de investigar que ha sido de él.
Es así como Pablo interrumpe a su
pesar las borracheras en el bar de Luigi, las disquisiciones filosóficas con
los miembros del Metaphysical Club y los escarceos eróticos por los bajos fondos,
para embarcarse en una demencial aventura que lo llevará a conocer el lado más
oculto de la ciudad.
La novela que nos edita Booket es una cómoda edición de bolsillo
con una suculenta portada que atrae e interesa a primera vista.
El autor del libro es, como antes he
nombrado, Pablo Tusset, pseudónimo
de David Homedes Informático de profesión, este dato es
prácticamente todo lo que se sabe sobre su vida personal.
Lo mejor que le puede pasar a un
cruasán ganó el Premio Tigre Juan, que se otorga a la mejor primera novela del año, y
consiguió un éxito sorprendente que le llevó a ocupar el primer puesto de la
lista de libros más vendidos.
El estilo de Pablo Tusset se caracteriza por el contraste entre el uso de un
léxico sencillo, acompañado con frecuencia por el humor, y la profundidad de los temas
tratados, que van desde el psicoanálisis al esoterismo y sirven para ofrecer un desencantado y cínico retrato de
la realidad. Entre sus obras destacan otros títulos como “En el nombre del
cerdo” o “Sakamura, corrales y los muertos rientes”.
Una novela de la mano de Booket que no dejará indiferente a los
lectores, con un final que pocos pueden imaginar a lo largo de la lectura. Con
un léxico sencillo y con toques de humor que hacen de la lectura de Lo mejor que le puede pasar a un cruasán,
una lectura amena, rápida e interesante.