Por Ángela Sánchez Vicente
Es más, él se preocupa por narrar sus obras literarias dando voz a aquellos protagonistas que acostumbraban a estar en silencio.
Su nuevo punto de vista más sensible y cercano nos ayuda a comprender los grandes hechos históricos y sus repercusiones en la piel de quienes más lo han sufrido. Es un homenaje a quienes lo sufrieron desde una segunda fila de atención.
Después de sus aclamados éxitos de crítica y público La niña alemana y La hija olvidada se acerca nuevamente a las librerías con el que ya es un nuevo éxito bajo el brazo.
En esta ocasión, gracias a La viajera Nocturna, viajaremos a la Alemania de inicios del siglo XX, nos pasearemos por la Habana unos años después sin dejar de ver la evolución de la historia europea a lo largo de todo el siglo.
Cuatro mujeres de carácter fuerte y decidido impregnadas por la fuerza que dar ser madres desplegaran su carácter protector y luchador para mantener a sus hijas a salvo.
Cada una de ellas con una evolución psicológica que refleja los peligros de la época, las ansias de libertad y el amor profundo que las lleva a tomar las decisiones más duras.
Sin duda, el amor hace girar el mundo a pesar de las Guerras, las persecuciones, los muros y todos los exilios que puedan haber.
Con Ally emprenderemos la huida ya que su hija mestiza está amenazada por los ideales de Hitler, con Lilith ya adulta sentiremos su dualidad entre las dudas hacia su pasado y la esperanza en su futuro mientras se encuentra en una gran encrucijada con su hija Nadine.
Todas ellas con ansia de verdad y libertad opuestas a los regímenes en los que viven pero con el convencimiento que con su palpitar pueden llenar el mundo de sentimientos verdaderos y puros.
Cuatro generaciones de mujeres vitales y revolucionarias que nos harán pensar en cómo las mujeres en general vivieron y sintieron el peso de sus hogares y familiares a sus espaldas en momentos en que la historia se lo ponía muy difícil y a la vez las enmudecían.
Es una obra excepcional.
