diumenge, 3 de novembre del 2013

Yo te miro



La editorial Suma de Letras nos ofrece una trilogía de lo más sugerente, Yo te miro es su primera entrega que continuará con “Yo te siento” y “Yo te quiero” que encontraremos publicadas en breve.

Yo te miro se convirtió de inmediato en un éxito de ventas y de crítica, alcanzando los primeros puestos en las listas de ventas. Con el respaldo de la crítica y de los lectores, la trilogía será publicada en todo el mundo.

Con esta novela descubrimos a su autora, Irene Cao, una joven italiana, licenciada en Clásicas y con un doctorado en Arqueología. Columnista en publicaciones femeninas, actriz, dobladora de películas y bailarina. Una mujer polifacética que ha de incluir en su currículo su nueva aptitud: escritora.

En Yo te miro, nos sentimos seducidos por el ambiente de Venecia, una ciudad resurgida del mar, donde se mezclan los rincones conocidos por solo sus habitantes y las zonas más turísticas, viviremos las Navidades y el Carnaval, el día a día de una ciudad que despierta de su pasado mostrando una cara más moderna que se obstina a aferrarse a su pasado y mostrar un esplendor único e incomparable.

Nuestra protagonista es Elena, una joven restauradora que se enfrenta a su primer reto como tal, ha de restaurar un fresco del siglo XVIII sobre el rapto de Proserpina. Elena es una joven seria, discreta y tímida. Su mejor amiga es Gaia, relaciones públicas, personal shopper, sus vidas son completamente opuestas, pero se complementan a la perfección, y su mejor amigo es Filippo, un joven arquitecto que bebe los vientos por Elena y que quizás sea más correspondido de lo que se espera.

Este triángulo que funciona perfectamente se desmorona cuando aparece Leonardo, un chef de renombre que obsesiona a Elena, la seduce y le muestra una parte de ella misma que desconocía, una sensualidad y un erotismo que le otorga el poder femenino, una seducción constante donde la única regla es no enamorarse.

Una relación tormentosa donde el frio de las normas colapsa con el calor de la pasión, una relación turbulenta donde los sentimientos afloran y dañan. Elena habrá de descubrir la respuesta a la pregunta del millón ¿Qué es el amor?, una relación basada en la sensualidad y la seducción es suficiente, o lo es un amor tranquilo y pausado basado en los cimientos de la amistad.

A medida que avanza la historia Elena cambia, deja a la solitaria Elena aparcada en el fondo de su mente y abre sus sentidos a experiencias nuevas, pero ¿esta nueva Elena será más feliz que la antigua?, ¿Conseguirá aquello que desea o lo perderá todo?

Una trama que atrapa y seduce, unos personajes complejos, con muchos claroscuros, unas descripciones del paisaje de la ciudad y de sus monumentos impecables. Si habéis estado alguna vez en Venecia os aseguro que reconoceréis algunos de los lugares, el aroma de sus mañanas y el sueño de sus posibilidades.

La autora pone de manifiesto sus propias dotes y conocimientos sobre arte en el personaje de Elena, un aspecto del personaje que además contrapone su clasicismo y su estilo frente a una nueva realidad.

He de reconocer que hay algún momento en el cual el lector puede llegar a pensar que las descripciones son excesivas, que el personaje de Elena más que evolucionar parece desquiciarse y descontrolarse, pero a veces el amor hace hacer locuras y creo que es el principio de una historia más grande que aún queda por contar y de algún secreto que desvelar.