divendres, 18 d’abril del 2014

Per Sant Jordi serenitat i una rosa blanca



La rosa blanca és el símbol de la innocència i de l’optimisme. És la màxima claror i foscor nul·la. És el color de la pau espiritual i tot un símbol d'intencions.


Per aquest motiu us volem recomenar:


Un mar d’emocions, és un recull de les principals emocions humanes proporcionant-les-hi la dimensió holística per tal que les puguem assimilar en la seva complexitat.
Es fa difícil parlar d’emocions pròpies però encara més és parlar-ne de manera genèrica, anomenant un títol i desenvolupant allò que aquesta genera en l’esser humà i com les podem gestionar per tal d’esdevenir persones que creixen i es desenvolupen en el confort i la tranquil·litat emocional.

Emocions positives com: agraïment, alegria, enamorament, eufòria, pau, serenitat i d’altres de negatives com: por, angoixa, buidor, soledat es donen la mà en aquesta enciclopèdia sobre allò intangible que marca la nostra quotidianitat i la nostra experiència vital. Molt sovint estem a la deriva de les nostres emocions i potser ens aïllem i recreem en les negatives com si fóssim illes envoltades d’aigua i les emocions positives ens permeten fer el salt necessari per poder apropar-nos als altres i mostrar-nos més oberts i amb més predisposició. Angle.

La editorial RBA nos presenta un libro de la Biblioteca de Rosetta Forner con un título de cuento a la par que curioso La reina que dio calabazas al caballero de la armadura oxidada

Para poder amar de forma incondicional hay que demostrar ser una reina con la corona bien puesta, valiente, honesta y emocionalmente independiente. Las reinas tienen que estar orgullosas de lucir sus coronas, de hacerlas brillar con su luz interior y nunca, en ningún caso, desprenderse de ellas, aunque para ello tengan que dejar atrás a determinados caballeros enfundados en una armadura que con el tiempo se ha ido oxidando cada vez más.

Esta gran fábula sobre la vida y los sentimientos, concebida a modo de brillante metáfora por Rosetta Forner, nos recuerda que jamás hay que perder ni una pizca de autoestima y nos muestra cómo hay que superar el pasado y tener fe en las posibilidades que brinda el futuro para encontrar o conservar el amor verdadero y comprender la plenitud de su significado. 


Para cambiar nuestra vida, primero tenemos que escribir un nuevo guion. A través de Escribiendo la nueva historia, Laura Esquivel afirma que si somos los protagonistas de nuestra propia historia, también podemos transformarla, darle una nueva dirección para no atarnos al pasado, no encerrarnos en el papel de víctimas ni vernos como seres indefensos frente a las circunstancias.
 
Esta es una original propuesta para reflexionar sobre lo que queremos hacer con nuestras vidas, sobre todo cuando perdemos el norte. Como nos dice la autora, si de verdad queremos que la realidad cambie, tenemos que empezar por un cambio personal, esa es la única forma de llegar al deseado cambio colectivo.
  

Un libro que no pueden dejar de leer todos aquellos que deseen tomar las riendas de su destino y encontrar un punto de partida para construir una nueva historia. Si queremos verdaderamente que la realidad cambie, debemos empezar por un cambio personal.  Suma de letras.


Desde el primer momento como Papa electo, u obispo de Roma, apelativo que él mismo prefiere, el hasta hace poco cardenal Jorge Mario Bergoglio dio señales claras al mundo de los cambios que traerá su pontificado. La misma elección del nombre de Francisco nos indica su prioridad por ser como Francisco de Asís, el santo que vivió en la pobreza y que consagró su vida a los más desamparados. Así queda definido en el título Jorge Bergoglio Francisco.

Su manera directa y espontánea de romper el protocolo y acercarse a la gente, su sencillez, que destaca en un Vaticano cargado de símbolos de pompa mundana y riqueza material y, entre otras cosas, la petición al clero de llevar una vida irreprochable hace que toda la sociedad tenga depositada una gran esperanza y confianza en esta nueva etapa que se inicia ahora. Plaza & Janés.

A través de sus propias palabras, sus ideas y los recuerdos más personales del papa Francisco, Andrea Tornielli, uno de los vaticanistas más prestigiosos en la actualidad, nos presenta el retrato de este jesuita argentino que gobernará una Iglesia dividida y que está llamado a ser el artífice de una importantísima transformación que sin duda cambiará el siglo XXI.