dimecres, 25 de maig del 2016

El Dios asesinado en el servicio de caballeros



Fantascy nos presenta una historia rocambolesca en la Barcelona de hoy en día donde los humanos conviven en la ignorancia con seres mitológicos, Dioses de los diversos panteones, minotauros, valkirias, vampiros, Gorgonas, centauros… y una infinidad de seres que existen en los cuentos de hadas y la imaginación.

El problema surge cuando los humanos no son tan ignorantes y deciden sacar provecho del secreto de este mundo.

El Dios asesinado en el servicio de caballeros es un caso de la detective Parabellum, Verónica, una humana en contacto con este mundo y que dedica su vida y trabajo al mundo mitológico. Sus dos armas principales son el conocimiento de la mitología y su astucia, sin olvidarnos de sus armas especiales.

Amigos y enemigos por igual hacen de esta presentación de la que espero segunda parte y a poder ser tercera una historia con un tempo dinámico, adictiva, con giros argumentales inesperados, ironía a raudales y un poco de mala leche.

Sergio S. Morán se estrena en estos lares con nota sobresaliente, dejando al lector conjurado entre sus páginas y anhelante del sabor de su ambrosia, si es más del panteón griego, o de las manzanas de iddun, si prefiere al panteón nórdicos.

El inicio de la historia es rocambolesca de por sí, Parabellum no recuerda nada, solo que lleva un Dios en el maletero y que se lo lleva a Antón, un vampiro forense, a partir de este momento la trama por descubrir el asesino del Dios se mezclara con un robo, allanamientos de morada, ataques descontrolados, verdades a medias y humanos jugando a un juego que puede terminar con una guerra cruel y sanguinaria.

Un caso épico que no decepciona y que mantiene muy bien el tempo de la narración.

Un aspecto que me ha gustado mucho es como el autor intenta mostrar la dualidad de carácter entre Verónica, la joven que quiere parecer normal con una vida insulsa y un novio que no la llena y su alter-ego, la detective capaz de patear traseros, de decir barbaridades y arriesgar su vida por un trabajo bien hecho.

No nos podemos olvidar de los personajes secundarios que darán consistencia a una historia que muestra a voz en grito una gran calidad en su prosa y su contextualización.

Aquí os dejo sus primeras páginas para que juzguéis vosotros mismos, pero os advierto que bajareis al infierno con Parabellum antes de su última página.