Bajo
una portada tan oscura como la trama principal de la novela es como se nos
presenta Newton la huella del fin del
mundo. Una novela de intriga, misterio, detectivesca y con reflejos de
novela negra.
En
el año 1985 Camilo Cavalieri, agente de inteligencia del Vaticano es asesinado
en extrañas circunstancias. Donato, su hermano también sacerdote, veinte años
después busca respuestas a los múltiples interrogantes que ese hecho sembró en
su mente.
Impulsado
por el amor hacia su hermano y con una fe en Dios acérrima, se cuestiona
grandes temas pilares de la religión terrenal, de la “oficina” que Dios tiene
en la Tierra pero que se aleja de sus palabras, mensajes y enseñanzas recogida
en el libro de los libros, en la Biblia.
El
papel de la Biblia se opone a la relación entre EE.UU. y la Santa Sede, donde parece
ser los que manejan todo el poder mundial en muchos ámbitos.
La
política vaticana queda cuestionada pues parece que para un cristiano los
valores aprendidos en las oraciones y rezos se alejan de las cuatro paredes que
guardan los tesoros vaticanos.
De
manera magistral, Raúl Vallarino nos
presenta unos personajes muy trabajados a nivel personal y espiritual, además
nos adentra en las diferentes maneras de vivir y sentir la fe.
Escrito
desde la rigurosidad y una gran documentación que comparte con los lectores,
los escenarios y los hechos son tan reales que se difumina hasta el extremo la
línea que separa realidad de ficción.
Estructurada
en capítulos cortos, hace que el ritmo de lectura sea agradable, ágil y
entretenido.
Mantiene
al lector con ansia de seguir investigando sobre los grandes temas y el enigma
de la posibilidad de realizar y estudiar fotos del pasado, fotos hechas de
energía.
SUMA de Letras acierta al cien por cien con esta
novela donde se entremezclan las conspiraciones parecidas a las historias de
Dan Brown y las teorías del fin del mundo al más puro estilo de Nostradamus.
Con
esta novela que, a mi parecer, queda abierta, hay muchas oportunidades de tirar
de hilos y seguir con la narración.
Si
por mí es, esperamos una segunda parte en la que se nos siga mostrando que no
es oro todo lo que reluce y que el hábito no hace al monje.
Muy
recomendable para aquellos a los que les gusta el misterio, la novela histórica
y religiosa y en general, a los amantes de la buena literatura.
Un
buen libro para empezar el otoño.