Hoy quiero presentaros unos nuevos amigos, la Editorial A fin de cuentos llega a
nuestra biblioteca de la mano de Babelio
con una propuesta infantil para niños y niñas traviesos y para adultos que en
lugar de llevar a Peter Pan en el alma llevan al Capitán Garfio en su Colección
Hú · Humor inteligente para niñas, niños y grandes.
Y rieron los
malos – fábulas amorales
es la antítesis de los cuentos tradicionales con su moralina positiva y buenos
consejos, este volumen recoge varios relatos cortos donde los malos son muy
listos y espabilados y los buenos pecan de bobos acabando en alguna ocasión en
la cazuela.
Un ejemplar amoral donde no se diferencia el bien y el
mal, creo que sería más justo hablar de picardía, de egoísmo y picaresca.
Pero antes de presentaros algunos de nuestros nuevos no
tan amigos quiero presentaros el libro en sí.
Con su tapa dura y un suave relieve al tacto nos
encontramos el contraste entre el blanco del fondo y el negro de algunos de sus
protagonistas destacando sobre todos ellos el águila que todo lo ve y lo
domina, del mismo modo que destaca con un suave verde la naturaleza, el hogar
de estos protagonistas.
Ellen Holmboe y Kristian Eskild Jensen pueden presumir de haber conseguido con este
ejemplar el Premio de Ilustración del Ministerio de Cultura de Dinamarca.
Cada relato se presenta en una doble página, en la
primera encontramos el relato en sí enmarcado por ilustraciones relacionadas
con aspectos de la narrativa y en la página contigua una ilustración completa
combinada a la perfección con los mismos tonos, todos ellos en tonos fríos, con
movimiento propio y muy detallados.
Cada una de ellas parece teñida con el color del pelaje
del animal, un hecho que aporta un ambiente más profundo de lo esperado, como
si el protagonista no solo ocupará su propia piel sino todo el espacio que le
acompaña.
Una vez leído creo que es una gran apuesta didáctica para
alumnos de los primeros cursos de primaria, se puede jugar a girar las
historias, a convertir los perdedores en vencedores, en aprender a distinguir
lo correcto de lo incorrecto, hacer juegos de rol y representar las breves
lecturas.
Del mismo modo lo recomendaría para leer en casa, para
pasar tiempo de calidad con los mayores y sencillamente pasar un buen rato.
Realmente me ha sorprendido su calidad tanto narrativa
como ilustrativa, su edición de alta calidad tanto en el cartoné como en el
papel, son en estos pequeños detalles donde se muestra el respeto por el
pequeño gran lector que todos llevamos dentro.