dijous, 16 d’agost del 2018

Como dos extraños


Hoy nos reencontramos con “Los Ravenel” una familia aristocrática británica de principios del siglo XIX que no encajan precisamente en el estereotipo de su clase.

Tras su presentación en “Un seductor sin corazón”, “Casarse con él” y “El diablo en primavera” hay llega su cuarta entrega  con Como dos extraños.

Sus protagonistas fueron secundarios de lujo en las entregas anteriores y ahora nos demuestran que nada es imposible, que con esfuerzo y perseverancia todo es posible.

Garrett Gibson es la única mujer médico en todo Londres, tuvo que estudiar en Francia ya que en su país estaba prohibido, es una mujer fuerte, perseverante, capaz, con una mente aguda y muy inteligente aunque poco experimentada en la vid social y las relaciones personales.

Quiero puntualizar que este personaje es un homenaje a Elizabeth Garrett Anderson, la primera mujer medico en Gran Bretaña.

Su vida transcurre entre la clínica y su trabajo voluntario en las zonas más pobres, un lugar peligroso de Londres donde se reencontrará con Ethan Yard, un hombre marcado por los secretos y quien la sigue para protegerla desde que la conoció. Un hombre duro, fuerte, con un conflicto interno sobre el bien y el mal. Un hombre que intenta por todos los medios alejarse de ella pero que no puede por más que lo intente.

Lisa Kleypas nos presenta una relación entre dos personajes poco convencionales, una médico, la única, y por decirlo de alguna manera, algo más que un policía. Desde este último encuentro Garrett descubre que Ethan es todo fachada, que bajo sus ojos fríos hay una luz cálida solo para ella y cuando el peligro les aceche solo juntos podrán sobrevivir.

Una trama de corrupción política, ansias de poder y los pocos escrúpulos harán caer la venda de los ojos de Ethan y ponerlo en gran peligro, a su vez este se acercará a la verdad de su infancia, a su familia a la que odia profundamente descubriendo que los errores de los padres no deben pagarlos los hijos.

Si habéis leído las entregas anteriores disfrutareis reencontrándoos con casi toda la familia al completo, pero si lo leéis de manera individual no tendréis problemas dado que la autora se centra en los protagonistas y emplaza muy bien a sus secundarios.

Vergara nos presenta una trama dulce y romántica, dos corazones que empezaran a sentir solo uno junto al otro aunque cabe la posibilidad que estos sean traicionados y dejen de latir.

Sabéis que no suelo ponerle pegas a esta autora ni a la editorial, pero esta vez le voy a poner uno, su presentación. Las entregas anteriores fueron en tapa dura con sobrecubierta, elegantes y con un estilo que han perdido al presentar esta continuación en tapa blanda. Sé que no es nada importante si la novela es buena, y lo es, pero para un lector que guarda las sagas como oro en paño, el formato puede ser importante.

Aquí os dejo sus primeras páginas. El amor y la acción os esperan.