dijous, 30 d’agost del 2018

El juramento del dragón


Creo que voy a romper todas las reglas no escritas sobre las sagas literarias, una de las más prolíficas entre ellas es la de los “Cazadores oscuros” de Sherrilyn Kenyon cuyo título El juramento del dragón es su entrega número veintisiete, algo que se dice pronto.

Me enganche a esta saga desde el principio, sus personajes te cautivan, su mundo de sombras y seres místicos te embruja y su ácida ironía, su picante picardía y su romance paranormal no deja indiferente. Una lucha entre el bien y el mal que nació en los Panteones de los Dioses griegos y que continuará hasta el fin de los días.

La autora añadió un nuevo marco histórico y nuevos personajes en “Hijo de nadie”, “El estigma del dragón” y “La marca del dragón”, las entregas anteriores a esta donde se recupera el misticismo y la leyenda de Camelot, la magia de Merlín y los dragones en general.

En este punto quiero decir que si habéis leído las entregas anteriores, todas, os reencontrareis con viejos amigos como Urian, Simi, Aqueron, el Santuario y muchos más de nuestros queridos amigos cuyas dichas y desdichas ya hemos compartido, pero para aquellos que os pique la curiosidad pero no os atreváis con tantos títulos de golpe podéis centraros en estos títulos basados en las leyendas Artúricas para entrar en situación, no es que sean diferentes pero por si mismas forman una nueva unidad dentro de la saga.

En esta entrega dos personajes marcados por el dolor de la perdida y encerrados en sí mismos deberán unir fuerzas para salvar a sus familias aunque el camino será arduo.

Medea es una daimon (vampira) con corazón de apolita, siempre ha seguido las normas pero su vida ha sido regida por su familia y por la cruel maldición de su abuelo Apolo, en ese momento decidió luchar y no ser una víctima más.

Falcyn es el primero de su especie, un dragón más antiguo que el mundo, le arrebataron lo que más quería y solo comparte su vida con Blaise, un dragón que en su forma humana es ciego y cuyo vínculo mantiene en secreto.

Dos personajes fuertes, independientes, que no están dispuestos a sufrir de nuevo por amor y que caerán en su propio miedo en brazos del otro.

Una de las entregas más divertidas e irónicas, estos personajes son ácidos y vehementes, se hacen querer y respetar a la vez, y por si fuera poco la autora nos guarda una sorpresa brutal que nos llevará de nuevo a “El beso de la noche”, título número cinco de la colección.

Plaza & Janes no deja de mimar a sus fieles seguidores con cada título que nos entrega. Aquí os dejo sus primeras páginas.

Bienvenidos a un mundo donde todo es posible, donde el peligro y la traición acechan en cada esquina y donde el amor verdadero florece en los corazones más yermos.