Negro, el color de la
elegancia, del estilo, imprescindible en el fondo de armario, un intemporal
chic para la mujer, pues bien, a partir de este momento esta definición tan
sencilla y a la vez sofisticada la tendremos que aplicar al género negro
firmado por manos delicadas y femeninas, unas mujeres brillantes que se
expresan de manera sublime, unas mujeres que consiguen captar el perfil de los
más bajos instintos criminales con agilidad e inteligencia.
El género negro siempre ha
gozado de buena salud, con autoras de peso como Agatha Christie, P.D.James o
Donna Leon, entre muchas otras, y aquí no somos menos, podríamos mencionar
Maria Aurèlia Capmany como la gran precursora del género.
Si me preguntáis a mí, os puedo decir que este género me gusta mucho, soy una "negrota" tal y como nos llama Anna Maria Villalonga, autora y coordinadora de este volumen imprescindible.
Si me preguntáis a mí, os puedo decir que este género me gusta mucho, soy una "negrota" tal y como nos llama Anna Maria Villalonga, autora y coordinadora de este volumen imprescindible.
Una recopilación de narrativa
breve en manos de trece mujeres, trece escritoras que desarrollan de manera concisa
y abrumadora historias negras con perfiles diferentes, no todas cogen la misma
perspectiva al redactar, encontraréis intrigas políticas, tramas más
psicológicas, con visión policial, con un aire de misterio y algunas donde el
humor negro es mortal.
Un canto coral con voces
únicas que desembocan en una rapsodia en negro sublime.
Ellas
también matan, es un título muy directo, una
invitación en negrita a descubrir autoras como la propia Anna Maria Villalonga o Maria
Carme Roca, dos personas que tengo el placer de conocer y que pueden tener
la pluma muy negra pero el corazón muy reluciente, autoras que he leído como Susana Vallejo, mitos dentro del género
como Margarida Aritzeta y autoras
que para mí hasta ahora eran desconocidas y de las que me he quedado con las
ganas de leer más como Teresa Solana,
Carme Torras, Núria Cadenes, Esperança
Camps, Empar Fernández, Susana Hernández, Marta Banús, Laura Díaz Roig
y Mònica Batet.
Esta recopilación no sólo es
válido por sí mismo, además abre una puerta hacia nuevas obras que nos han
podido pasar desapercibidas escondida bajo grandes campañas de marketing de
autores extranjeros. Dicen que el tarro pequeño está la buena confitura, pues
os puedo asegurar que en los breves relatos de estas autoras se esconden trece
diamantes negros.
Una de las cosas que más me ha
gustado de esta recopilación ha sido su composición, como se presenta primero
la autora con una breve biografía y algunos de sus títulos publicados y a
continuación su relato.
Cada lector puede elegir qué
historia quiere leer primero, si quiere seguir el orden del volumen o empezar
por el autor que reconoce o aquel que desconoce totalmente, yo he sido incapaz
de hacerlo por orden, tras caer atrapada entre sus páginas y sobre todo el
título de la introducción "Si hay que matar, matamos" fui
directamente al final, me pudo la curiosidad de saber que nos había preparado
Anna Maria, y después fui haciendo saltos, Maria Carme Roca y su humor negro me
esperaban con los brazos abiertos, Susana Vallejo con su aire gótico invita a
recrearse en la ambientación y ... no daré más pistas, sólo os puedo decir que
este volumen es más, es una clave, un reflejo de la calidad de nuestras
escritoras, un sueño para todos los amantes del género negro.
Una propuesta que aleja el
victimismo del género, nuestras autoras son verdugos con plumas afiladas.
Quiero felicitar a Marc Moreno y a Delito por esta obra. Es amena, rápida de leer, engancha y al ser
historias breves te ves atrapado en un círculo vicioso que te lleva de una a la
siguiente sin casi darte cuenta. Un acierto jugar con el negro y el número
trece, tentar a la suerte puede resultar un éxito asegurado.