Por Ángela Sánchez Vicente
Esta
semana os presentaremos en La Petita Llibreria nuestras impresiones sobre la
nueva novela de Ildefonso Falcones titulada
“Los herederos de la Tierra” la ansiada continuación de La catedral del mar.
Pero
para hacer justicia a tan insigne autor y a tan aclamado título queremos
rescatar nuestro parecer sobre la primera parte gracias a la Nueva edición con prólogo del autor que
nos ofrece Debolsillo con motivo del
décimo aniversario de la edición.
Que
este autor es un maestro de maestros no es ninguna novedad ya que en su amplia
bibliografía hay éxito tras éxito pero de alguna manera La catedral del mar fue ese salto para que el público lo conociera
mucho y mejor.
Como
barceloneses le debemos un mayúsculo gracias dado que ha plasmado una novela
increíble con muchísimos personajes alrededor de una de las más importantes
iglesias de la ciudad; tan importante que se la conoce como la segunda
catedral, la Catedral de los pobres o la Catedral del mar.
Siglo XIV,
Barcelona.
Bajo la Corona de Aragón, la Ciudad Condal se encuentra en su momento de mayor
prosperidad y los habitantes del humilde barrio de pescadores de la Ribera
deciden construir, con el dinero de unos y esfuerzos de otros, el mayor templo
mariano jamás conocido: Santa
María de la Mar.
Un
vaivén de personajes que prestaran recursos materiales u horas de su vida a tan
tremenda construcción verán como sus deseos y sus vidas se entrelazan para
siempre.
Relaciones
amorosas, odiosas, de respeto, de devoción y de otros múltiples sentidos se dan
cita en la ribera.
Francesca
y su hijo que por un lunar sabremos de quien es, revueltas populares, un padre
dispuesto a matar por su hijo, la amistad de dos niños, escasez de suministros
en Barcelona, la peste, la llegada de los judíos, la salvación de unos niños,
el agradecimiento, condena de cárcel, pobreza, solidaridad, violencia… muchos
ingredientes que sólo tan distinguido autor sabe dosificar para crear una
novela tan cautivadora y adictiva como esta.
Todos
la hemos leído y quien no lo ha hecho esta es su oportunidad, una obra que toda
biblioteca personal debe tener.
No
os explicaremos mucho los entresijos, es necesario que la desgranéis vosotros
mismos sabiendo en qué periodo histórico estaba contextualizada y como se
ordenaba la sociedad en esos días.
¿Os
animáis a poner una piedra en esta catedral?
¡Venga
va! Se merece una buena lectura.