Prometo
perder, un título lo menos que curioso para una obra más compleja de lo que
parece.
Con una portada divertida, fresca y actual y un subtítulo
como El que ama siempre gana,
nos imaginamos frente a una novela
romántica, quizás divertida e irónica, pero a veces la imaginación se pasa de
la raya o no llega.
Pedro
Chagas Freitas nos presenta una recopilación de frases, experiencias,
breves relatos sobre el amor en todas sus facetas, ya sea entre parejas,
amigos, familia, basado en el cariño o en el sexo, incluso el amor a un animal
que nos acompaña por la vida, y todo ello envuelto en el miedo al fracaso, la
emoción del primer amor, el deseo más carnal y la ilusión más inocente, sin
escatimar en los sentimientos no correspondidos que crean dolor, odio e ira.
Así que ya veis lo mucho que me equivocaba, este volumen
tiene de todo para llamarnos la atención, hacernos pensar sobre nuestras
relaciones no solo románticas y en cómo podemos ser rechazados o rechazar a
otro teniendo en cuenta sus consecuencias.
El autor se calza los zapatos de ella y de él, los del
padre y los del hijo, los del anciano que se siente solo en una residencia, e
incluso en los de una stripper de ochenta y tres años.
Hace brillar el alma del poeta con sus versos y sangrar
al escritor que con su sangre desgarra su corazón dolido.
Después de haberlo leído comprendo el título, quien nunca
pierde nunca gana, no podemos saber que hemos encontrado ese amor si nunca lo
hemos perdido, del mismo modo que no podemos sentir como el padre si no tenemos
hijos.
Una de sus reflexiones resume lo que desea la esencia
humana. Queremos lo que no tenemos y cuando lo tenemos, seguimos queriendo lo
que no tenemos.
El amor no tiene rostro, dicen que varía según el color
de las gafas con las que miramos a los demás, que tiene más de química que de
física, pero el concepto universal en sí, el sentimiento cálido que invita a
soñar y a vivir, ese amor, es a mi modo de ver casi imposible de definir.
Plan B nos recuerda que Todos somos imprevisibles
ante el amor. Todos estamos dispuestos a ganar. Pero sabemos que podemos
perder. En el amor se gana, se pierde, se goza, se sufre, se vuela...
Aquí os dejo sus primeras páginas, que no su primer
capítulo, simplemente dejaros llevar por el corazón.