Alguna vez os habéis preguntado si realmente existen las
segundas oportunidades y las terceras, si el príncipe azul existe o es
ciertamente un sapo con malas pulgas, si el amor de para toda la vida es real o
se magnifica al borde del abismo.
En Menos mal que
te tengo a ti, su autora María
Daniela Raineri, conocida por su obra anterior “Si todo fuera fácil”,
publicada también por Vergara, nos
presenta una historia rocambolesca de amor y desamor, una historia que dejará
perplejo al lector, una historia casi inverosímil.
Nuestra protagonista es Allegra, una joven de diecisiete
años que acaba de cambiar de ciudad, de colegio, sus padres no la entienden, su
padre casi nunca está en casa y su madre es una mujer más de plástico que de
carne y hueso, sus amigas son superficiales y esnobs, no encaja en el grupo de
las guapas ya que es demasiado inteligente y demasiado guapa para ir con las
feas, su vida es un caos y su corazón bebe los vientos por Gabriel.
Su vida cambia de la noche a la mañana cuando se
encuentra sola, sin lugar a donde ir a excepción de con su abuela alcohólica y
su abuelo chocho. Revisando las cosas de
su padre se encontrara con un nombre, Luisa, una joven de treinta y cinco años,
soltera y quizás su única esperanza para sobrevivir en un mundo adolescente
donde las mentiras, los engaños y las traiciones están a la orden del día.
Así es como comienza una nueva vida para Allegra y Luisa,
no sé si Allegra es muy lista o muy inconsciente, pero creo que en su situación
no hubiera actuado con Luisa como ella, creo que primero le hubiera arrancado
la piel a tiras, pero reconozco que cuando se establece la relación entre
ellas, el lector le perdonará todo a Luisa.
Menos
mal que te tengo a ti nos muestra las inseguridades de la adolescencia, pero
también las de la madurez, no existe una edad concreta en la cual dejamos de
sentirnos inseguros, todos tenemos nuestro corazoncito y un talón de Aquiles
más o menos grande.
No es de extrañar que Luis Prieto llevará a la gran
pantalla esta compleja historia el año 2009 con una adaptación de guion propio
y protagonizada por Stefania Sandrelli y Claudia Gerini.
Una historia ágil, dinámica que muestra las luces y las
sombras de la vida, un melodrama que en definitiva nos muestra los lazos de la
familia, la familia del alma, aquella que al final del día no te abandona, te
consuela si estas triste o se zampa un bote de Nutella contigo mirando la tele.
Una novela donde las ansias de vivir pesan más que la
desesperación y donde el amor y el perdón le dan carácter, fuerza y coraje.
¿Estáis preparados para conocer a dos mujeres tan dispares como el aceite y el
vinagre, pero que aliñan de manera magistral un futuro prometedor?