Por Ángela Sánchez Vicente
Os presentamos Cuentos
inquietantes, un compilado de los mejores relatos de Edith Wharton.
Esta escritora merecedora del Premio Pulitzer tenía la
capacidad de sumergir al lector en la atmosfera que ella quería. Cada sensación
podía tener mil matices y los reflejaba a la perfección con su pluma aguda y
atrevida.
Hechos ultraterrenales, sobrenaturales… una fina línea
entre la realidad, la sugestión y el miedo que hacen tener a sus lectores en
una tensión constante y a sus protagonistas en un sinvivir.
Creo que es de las pioneras en usar el miedo unido al
poder de la mente o lo que hoy podría ser un miedo psicológico o acercarlo
incluso a un thriller.
Relatos cortos, concisos, llenos de imaginación e
interrogantes se dan cita por primera vez en esta obra de la Editorial Impedimenta.
Difícil de explicar cómo sabe dominar hasta los
silencios, si, los silencios y los tiempos son fundamentales. Nos da el tiempo
justo para que pensemos pero a la que volvemos a leer nos ha dado una vuelta
más de tuerca y otra sorpresa se abre camino.
Nunca la sabrás descodificar hasta llegar a la última
página y entonces ahí, en ese instante, te darás cuenta de la grandiosidad y la
genialidad de esta autora.
En sus cuentos no hace más que reflexionar sobre la vida
y las reacciones humanas pero todo envuelto en ese halo que solo ella podía
conseguir.
Parece que nos hace protagonistas de sus cuentos con una
agilidad innata.
Muchos de sus fantasmas no llevan cadenas y una bola o
una sábana como vestimenta sino son temores del género masculino de antaño como
el divorcio, el rechazo social, la paternidad, el éxito y el fracaso.
¿Será que nuestros fantasmas habitan en nuestras mentes?
A juzgar por la ironía y el sarcasmo de la autora podemos
deducir que en gran parte es así.
Nosotros creamos a nuestros propios fantasmas
y hasta parece que les cogemos un cierto cariño.
¿Queréis pasar un poco de miedo? ¿Queréis dejar a
vuestras neuronas en jaque?
Si la respuesta es afirmativa id a vuestra librería de
confianza y disfrutad de esta lectura.
Cada cuento es mejor que el anterior y al ser cortitos
propicia a una lectura ágil y entretenida sin tener que estar pendientes de una
gran trama.
Es ideal para acabar de matar a los fantasmas de estas Navidades.