Editado por Christopher Tolkien e ilustrado por Alan Lee os presento Beren y Lúthien, una historia de amor épica que nos llevará a la Primera Edad de la Tierra Media, cerca de 6500 años antes de los eventos narrados en su libro más famoso, “El señor de los Anillos”.
Una historia que los amantes de Tolkien ya conocemos de oídas en la voz de Aragorn en forma de canción y explicada en los apéndices de El señor de los anillos, una historia que inspiro la de Aragorn y Arwen, un amor entre un humano y una elfa.
Antes de centrarme en su historia me gustaría poder decir que el alma de esta historia es el amor de Tolkien y su esposa Edith, la manera en que se conocen los personajes es la recreación de un momento en la vida de la pareja real e incluso en sus lapidas bajo sus nombres se pueden leer los de Beren y Lúthien.Así podemos decir que esta historia esconde un amor incondicional y real.
Beren es un humano, un superviviente que habían resistido a Morgoth, el Enemigo Oscuro, después de la "Batalla de La Llama Súbita" Dagor Bragollach, en la que Morgoth había conquistado la mayoría del norte de la Tierra Media. Después de la derrota de sus compañeros, Beren huyó del peligro hacia el reino elfo de Doriath. Ahí conoció a Lúthien, la única hija del Rey Thingol y Melian la Maia de quien se enamoró irremediablemente.
Lúthien tardó un poco más en caer en las redes del amor pero tenían un gran impedimento en el padre de ella, el Rey Thingol no creía que un humano fuera suficiente para su hija, así que le encomendó una misión suicida a la que Beren accedió.
Su deber era robar un Silmaril a Melkor, un mal en si mismo, lo que ninguno esperaba era que Lúthien partiera tras sus pasos para acompañarle en su misión y compartir con él su destino.
En la historia no viajan juntos y cada uno vivirá sus aventuras y desventuras con compañeros de lo más Tolkianos.
Esta historia en realidad es un hilo más del gran y amplio mundo de la Tierra Media, con una amplia lista de nombres en los textos originales al final del volumen y unas ilustraciones impresionantes, oníricas y maravillosas de color que nos llegan a transportar a ese mundo donde todo parece posible y donde la esperanza en la lucha del bien contra el mal balancea a favor de la luz y no de las sombras.
Que puedo decir de la prosa de un hombre que ha cautivado generación tras generación, que es capaz de conjugar la prosa con el verso, capaz de crear un mundo propio, lenguas propias, seres con raíces mitológicas pero con mucha humanidad.
Encontrarme con Tolkien entre las manos es más que un placer, es un viaje a la imaginación, al pasado o al futuro, a un lugar donde todo parece posible aunque los obstáculos sean en apariencia imposibles.