dimarts, 12 de març del 2019

Marcovaldo


Por Ángela Sánchez Vicente

Hoy os presentamos una obra completísima de la cultura tradicional italiana que se ha convertido a lo largo de los años en una obra esencial de occidente.

Por su profundidad reflexiva, por su prosa poética y por la propia impronta de su autor, Marcovaldo es todo un icono a tener en cuenta.

En esta obra conoceremos a un padre de familia numerosa muy gris, con una vida no muy alegre pero que nunca deja de soñar y de creer en un mañana mejor. 

Es un hombre con un sueldo muy escaso que vive presa de la sociedad actual y siente la ciudad como una cárcel en la que no le gusta estar y en la que cree que sus hijos no van a crecer felices pero pocas opciones le quedan para subsistir.

Desde su ansia de mejorar y de ver lo bueno de la vida en pequeñísimos detalles siempre pone el foco en la naturaleza. 

Una simple hoja de árbol en el suelo ya llama su atención y le desvía la mirada a rótulos fluorescentes, a grandes luces y símbolos de la ciudad.

Narrada desde la humildad y una mente positiva vemos la evolución del tiempo, de la ciudad y del propio protagonista en cada capítulo en que se estrena una estación del año nueva.

Primavera, verano, otoño e invierno se van dando paso con elementos tan simples de transición como una hoja, una seta o cualquier símbolo que él extrae de la naturaleza.

La pluma de Italo Calvino se combina esta vez con las ilustraciones de Alessandro Sanna para darle aún más profundidad a los relatos.

El blanco y negro de la ciudad se combina con el gris del protagonista y la atención la fijamos en los naranjas que nos regala la naturaleza.

Parece un libro simple que parte de una premisa muy llana pero la verdad es que la crítica mordaz a la sociedad, a la vida en los núcleos urbanos y los hábitos que se adquieren y se entretejen con la trama principal hacen de esta obra un esencial para entender la naturaleza humana del mundo y de hacía a donde vamos desde la visión de un gran soñador.

Gracias a Libros del zorro rojo podéis conocer a este ingenuo protagonista y a su gran familia en fragmentos animados, melancólicos y llenos de humildad.

No se puede salir ileso de esta obra tanto por su calidad literaria como por la trama que teje el autor.

Esta edición es fabulosa y magníficamente ilustrada para completar el significado que el autor quiso plasmar en su día.

¿Os animáis a ir a la ciudad con Marcovaldo? Seguro que aprenderéis a mirarla con unos ojos renovados.