Yo ya estoy muerta.
Con esta sentencia se nos presenta la novela Ella lo sabe, con una portada donde el rostro de una mujer se desdibuja y se vuelve borrosa tras lo que parece un cristal.
Lorena Franco nos presenta un thriller angustiante donde nuestra protagonista reflejará en su propio hogar la imagen de una jaula de secretos, sospechas y culpabilidad.
Andrea, es una escritora de thriller negro que no ha publicado ninguna novela, pero que en ellas enfoca los fantasmas de su pasado a modo de catarsis y autoreflexión, su vida es muy rutinaria, vive con su marido Nico, un abogado de éxito, hasta que un día se presenta en su puerta su cuñado Víctor, un hombre que no le gusta y que se lleva bastante mal con su propio hermano.
La vida irá transcurriendo hasta que una mañana, mientras Andrea mira por la ventana de su casa cotilleando la vida de sus vecinos, ve a su amiga y vecina Marta subirse al coche con su cuñado Víctor, hecho de por sí raro, pero lo que ya la desquicia es que Víctor regresa y María no.
Andrea tiene muchas preguntas, ¿Se habrá ido por voluntad propia? ¿Volverá? ¿Quién es realmente Víctor?... Todas estas preguntas la atemorizan, no sabe si decir lo que vio o callar.
Descubrirá muchos secretos, su cuñado carga con un asesinato a sus espaldas, María no se llama María y su marido Carlos no es el marido ejemplar que todos creían, eso sin contar que Nico, su propio marido ni la toca y que su mejor compañía es una botella y unas pastillas.
Unos personajes que entrelazan secretos del pasado, muchas sombras manchadas de sangre y con caracteres marcados y que distan de la tranquilidad de una familia clásica.
B de bolsillo nos presenta un thriller bien hilvanado, con personajes sólidos, con la información para el lector en cuentagotas y con giros inesperados que mantienen el suspense y la tensión entre sus páginas.
Con capítulos relativamente cortos y marcados cada uno por la voz de un personaje, muestra la capacidad de la autora de equilibrar la balanza entre unos y otros, ofrecer diversas perspectivas y la oportunidad de elucubrar teorías propias.
Una lectura que atrapa al lector dándole su espacio, si Andrea vive la vida de sus vecinos a través de su ventana, el lector vivirá su vida a través de las páginas de esta novela.
Aquí os dejo sus primeras páginas, si empezáis a leer no podréis dejarla escapar.
