Wulf Dorn regresa a nuestras manos tras
hacernos sufrir en “La psiquiatra”, “El superviviente”, “Acosado” y “Phobia”
yendo un paso más allá con su último título Los herederos.
“Crees que todavía tienes todo el tiempo
del mundo.
Lo que no sabes es que tu tiempo se acaba.”
Antes de hablaros de la historia creo que es interesante
recoger algunas de las palabras del propio autor en su prólogo donde nos relata
que la trama es ficticia pero que las historias secundarias tienen un trasfondo
real, algo no poco usual aunque cuando vayáis leyendo este apunte marca una
gran diferencia.
La trama nos presenta a Laura Scharder, una mujer
embarazada que es rescatada de un accidente de tráfico, el coche no es suyo, el
caso es que no se encuentra a Patrick quien ha llamado a emergencias y la ha
socorrido y en su maletero aparece el cuerpo sin vida de una niña.
Frank Bennel, criminólogo y Robert Winter, psiquiatra, se
enfrentan a un misterio dado que el pueblo de donde es Laura esta desierto,
ciento sesenta y cuatro almas han desaparecido y solo Laura sabe que ha
sucedido.
Solo la confianza entre estos personajes nos ayudaran a
llegar a la verdad.
Este hecho hace que nos encontremos frente a una
narración en dos tiempos, la actual con la investigación y el pasado en la
narración de Laura.
Wulf Dorn sigue siendo un mago de las palabras, su prosa
directa nos hunde en el miedo psicológico que deriva de la trama, es en ciertos
momentos agobiante, angustiante, un thriller en toda regla que juega con las
emociones de los personajes y con sus mentes.
El lector sentirá las palabras de Laura, como la trama
fluye de sus recuerdos y como se intercala entre ella breves historias
protagonizadas por niños, y no precisamente angelitos.
Mantiene un tempo pausado, es como si nos estuviera preparando
para dar un paso más, este hecho facilita mucho un sentimiento de empatía con
el lector siempre guardándose un as en la manga, dando giros argumentales
inesperados y con un final que merece ser leído.
Una historia oscura, profunda, psicológica que atrapa al
lector. Yo ya había leído sus entregas anteriores presentadas por Duomo Ediciones en su colección Los
imperdibles y reconozco que su pluma ha cambiado, evolucionado, mejorado a mi
modesta manera de verlo.
No he podido dejar de leer, por ello os invito a leer sus
primeras páginas.