Por Raúl Gotor
El valor del arte reside en su belleza. Poseer una
obra de arte es como pretender ser dueño de una puesta de sol.
La extraña historia de
Maurice Lyon es la
primera novela de Oriol Nolis con la
cual consigue el objetivo de hacernos pasar un buen rato al mismo tiempo que un
tipo de angustia sana y que, de paso, reflexionemos sobre la posesión y el ser
humano.
Oriol
Nolis ejerce de periodista desde hace más de quince años y ahora nos sorprende
apostando por una ópera prima basada en el dinero, la fama, el poder y el lado
más oscuro de la mezquindad humana.
Suma de Letras nos presenta a Maurice Lyon, primogénito
de una acaudalada familia francesa que con su propio museo, ha basado su vida
en la adquisición de obras de arte. Detrás de ésta opulenta fachada subyace una
terrible historia familiar de la cual poco a poco iremos descubriendo su importancia
en el relato.
Maurice
lleva años desterrado en Barcelona después de que su padre lo expulsara de
París a partir de un desafortunado episodio familiar. Una vez en la ciudad
condal y convertido en un Adonis arrogante, comienza a trazar su plan de
venganza una vez fallecido su progenitor.
Seremos
partícipes directos de una maquiavélica vendetta de un personaje que, arrebatado
de todo aquello que le pertenece como hijo mayor, se moverá impulsado por el
odio y el rencor generado por años de humillación personal.
Controvertida,
delirante, imposible... su personal vindicación va a dar con aquello que más le
puede doler a su propio hermano Jacques: generar su propia colección de deseos.
«Digamos que se trata de una colección de... deseos.
Sí, me gusta esta expresión: una colección de deseos. ¿Entienden de lo que les
estoy hablando? Una colección de piezas queridas, admiradas y deseadas a lo
largo del tiempo por miles de personas que incluso, en algunos casos, estarían
dispuestas a dar su vida por ellas.»
Una
historia que nos habla de la locura, de las consecuencias de la falta de afecto
infantil desde una perspectiva que aúna tanto la tragedia como la comedia en
según qué momentos.
Una
narración ligera, agradable y de fácil digestión que hace que se pueda llegar a
querer y comprender a personajes que en un principio pareciera que jamás
deberían compartir tu empatía.
¿Podemos
coleccionar almas, sentimientos? ¿Es todo aquello tangible y material capaz de
suplir la afectividad humana? Un relato mucho más profundo y maduro de lo que
pudiera llegar a parecer en un primer momento debido tal vez al tipo de letra y
detalles del libro que se escapan a la creatividad y madurez literaria que nos
ofrece Oriol Nolis en éstas 300 páginas aunque hacen mucho más amena la lectura.
Empatizareis
con un monstruo, un vividor de cuerpo esculpido y perfecta sonrisa que alberga
dentro de él una oscuridad mucho más profunda que la que yace en el interior de
su enorme caja fuerte blindada.
Dedicado
a todos aquellos que quieran una lectura liviana y agradable pero que al mismo
tiempo desentierre todos los fantasmas que más de uno puede llegar a tener llevado
al extremo en su propia alma.