Por Ángela Sánchez Vicente
Hoy volvemos a tener entre manos una obra maestra que
estamos seguros que pasara a la posteridad por su rigor, su ritmo, su
entusiasmo y su verdadera historia.
Christian
Gálvez ya nos mostró a través de “Matar a Leonardo Da Vinci” que no es para nada
sólo una cara bonita. Su gran interés por la cultura clásica, por sus
protagonistas y espacios juntamente a su vocación como docente nos abre la
puerta a un mundo literario inmenso, rico, trabajado y altamente adictivo.
En su última novela titulada Rezar por Miguel Ángel conoceremos un poco más sobre la historia de
este gran personaje a la vez que la historia se desarrollará en diversos
niveles entre los escritos bíblicos y sus interpretaciones por parte de eruditos
y la jerarquía eclesiástica.
Además podemos ver el telón de fondo perfectamente desarrollado
para situarnos en la Europa del siglo XVI en que la Santa Sede vive un cisma
provocado por el descubrimiento del nuevo mundo.
Hechos como la llegada al trono Español de Carlos V y el
posterior tambaleo de la Francia de Francisco I y la Roma de Gregorio VII serán
cruciales para el renacer de una nueva Europa.
Con una pluma magistral y un arte por encontrar la
palabra justa nos dibuja al Miguel Ángel desconocido.
Parece que este joven autor tenga en las venas tinta en
lugar de sangre y en su corazón habitan grande secretos históricos a los que él
quiere dar voz y sacarlos de la sombra.
Es como un celestino entre las grandes mentes y nuestro
conocimiento.
Además de ofrecernos una novela histórica respetuosa, sin
anacronismos y comparable a los granes best-sellers internacionales potencia su
poder didáctico y nos ilustra de manera muy directa sobre una sociedad muy
concreta que rodea a su protagonista.
Gracias a Suma de
letras nos reencontramos con uno de los mejores autores de novela histórica
en la actualidad.
Su frescura, su manera de tramar los hechos tan
importantes con suma normalidad lo hace accesible a todos os púbicos.
Hacernos cao y no os arrepentiréis de leerlo y sobretodo
de descubrir la producción de Christian
Gálvez que ha saltado con todo su talento la etiqueta de “escritor mediático”.
Su cercanía, su homenaje a la memoria histórica colectiva
y su pasión lo hacen inolvidable.
Desde aquí le deseamos muchos éxitos más y esperamos con
ansias “Salvar a Rafael”, su próximo título que conformará una trilogía de
títulos independientes pero complementarios.
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