Por Ángela Sánchez Vicente
Sí,
soy una amante de la música. Y estoy muy orgullosa de ello; con música he
reído, he llorado, he soñado, he creado mis mejores textos, he crecido, me he
enamorado, me he equivocado, me he tranquilizado.
Muchas
veces me pregunto qué es lo que tiene la música que hace capaz que se me ponga
la piel de gallina, me ponga de pie a bailar o se me llenen los ojos de
lágrimas.
Admiro
sin límites a los grandes compositores que jugando con las notas y los
silencios crean estas sensaciones tan profundas y evocadoras.
En
Mozart mola y Bach todavía más descubriremos
un poco más de este mundo tan amplio y mágico que hace las delicias de nuestras
emociones.
En
esta obra se nos invita a entender la música clásica, a sus autores, el mecanismo
de composición y a ser unos amantes de esta hasta ser casi dependientes de sus
encantos.
Con
un vocabulario simple y directo, sus autores, Matteo Rampin y Leonora
Armellini nos ofrecen un paseo por los puntales de los principales
conceptos.
Desde
el abecé de la música y su matemática hasta los grandes templos donde se puede
escuchar pasando por los principales exponentes y movimientos que usaron los
grandes autores.
Desde
los inicios hasta la crisis de la música clásica son explicados de una manera
llana y apta para eruditos en la materia y para gente como yo que amamos
profundamente este arte pero nos falta un trecho de formación académica en este
campo.
Son
las nociones básicas para que entendamos la importancia que tiene en nuestro día a día; la música es sanadora,
inspira, es un arma pedagógica y estimula las mentes de los más pequeños.
¿Qué
más se le puede pedir?
Creo
que Duomo hace un gran acierto al
publicar esta obra pues nos damos cuenta cómo hemos acabado escuchando música
sin sentido… que tampoco está mal ni es reprochable si te despierta algún
sentimiento pero hay que hacer memoria y aprender a apreciar la música de los
grandes como Mozart, Bach, Schubert, Paganini, Wagner y muchos más.
Grandes
hombres que descubriremos que en sus vidas arriesgaron y sufrieron por partes
iguales y el papel que la música jugó en sus vidas.
Para
mí la música es un bálsamo para la vida ajetreada que llevamos y puedo decir
que es mi droga pues me hace sentir en el paraíso.
Homenajeamos
a los principales autores con esta obra y recordad que la música es el medio de
transporte más rápido que existe para viajar en el tiempo y el espacio.
¿Os
animáis a descubrir curiosidades musicales? Seguro que no os arrepentiréis.
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