la puerta de los ángeles

Si os enamorasteis de la escritura de Penelope Fitzgerald con los títulos “La librería”, “El inicio de la primavera” e “Inocencia”, tenemos el placer de presentaros el último volumen que la Editorial Impedimenta rescata del olvido y del tiempo para que pueda caer en nuestras manos voraces de grandes y celebrados clásicos.

En La puerta de los ángeles nos plantaremos a puertas del St. Angelicus, un college prestigioso en que no todo el mundo puede entrar y sus seberas normas deben ser cumplidas por todos los que intenten traspasar sus muros.

Ninguna mujer ha traspasado esa frontera en los últimos quinientos años por lo que la idea del amor o el matrimonio es una idea a sacrificar. 

¿Qué está dispuesto a hacer nuestro protagonista? ¿Y los otros personajes que iremos conociendo? ¿Quién pasará la línea y quien se quedará viendo la vida desde a fuera?

Fred Fairly es joven, brillante, inteligente y tiene en su mano ser el profesor de Ciencias en Cambridge pero lo que no saben los eruditos de Cambridge es que éste es uno de los cabecillas de la Sociedad de los Desobedientes y se revelará ante el mundo que acaba de conocer.

Confesará que ha perdido la fe y que tras un accidente de bicicleta su mundo se ha puesto patas para arriba al conocer a una muchacha de dudosa reputación pero corazón noble.

¿Por qué tipo de chica la debe de tomar? ¿Importa su pasado o lo que es ahora? ¿No prevalece lo que a él le hace sentir?

Fred las pasará “canutas” al debatirse entre el amor o una seguridad laboral y económica. ¿Por cuál se decidirá? ¿Se puede quedar con todo? ¿Ganará su “ángel” o su “demonio desobediente”? 

En una novela donde no hay blancos ni negros, el protagonista nos mostrará toda una escala de grises que nos dejará con la boca abierta y con más y más intriga con el devenir de los capítulos.

De una hermosura impresionante y unas descripciones minuciosas podemos disfrutar una gran novela y una reflexión sobre el ser humano. La obediencia, la impulsividad, la posibilidad de cambiar de rumbo y ser dueño del propio destino son los ingredientes principales de este cóctel con reminiscencias del sabor de los grandes clásicos de antaño.

Una novela para saborear y reflexionar. Una lectura donde perdernos entre bellas palabras, una dulzura exquisita y unos amores de antaño donde los tiempos son largos, las finalidades de las parejas son muy determinadas aunque la pasión y lo prohibido también juegan un rol muy importante.

Una obra imperdible y una autora que se hace amiga del lector en el devenir de las páginas. Yo de vosotros no me la perdería.