Por Maria Valle Viña
Editorial Impedimenta
nos presenta en una edición de 316 páginas y unas ilustraciones magníficas de
Edward Gorey el libro Matemos al tío,
una novela que podemos definir como alegremente siniestra.
Barnaby Gaunt tiene diez años y acaba
de quedarse huérfano. Solo y desamparado en la vida, ha de vivir con su tío,
por lo que viaja a una preciosa isla remota de la costa de Canadá, llena de
amables ancianitos y donde hay hasta un policía montado. A primera vista, todo
indica que le espera un verano perfecto.
Salvo por un pequeño problema: su tío
está tratando de matarlo. Heredero de una fortuna de diez millones de dólares,
Barnaby se cansa de decirle a todo el mundo que su tío, un hombre misterioso y
aterrador, anda detrás de su herencia, pero nadie le cree.
Nadie salvo Christie, una niña rara y
de poco comer, que llega a la conclusión de que Barnaby solo puede detener a su
demoniaco tío de una manera: matándolo primero a él. Y así, con la ayuda de Una
Oreja, un puma salvaje a quien los isleños atormentan desde hace años, Christie
y Barnaby traman un plan infalible.
La autora es Rohan O’Grady, pseudónimo de la novelista canadiense June Skinner.
No empezó a escribir hasta casi cumplir los cuarenta años, pero entre 1961 y
1970 publicaría cuatro novelas entre las que destaca, sin duda, la novela que
hoy os presentamos.
Matemos al tío (1963), que fue llevada al cine con el mismo título en 1966 por el legendario director de películas de terror William Castle, y que está considerada una de las más importantes novelas góticas del siglo XX, un clásico de culto. Un título mítico también por la llegada de Edward Gorey que ahora Impedimenta recupera y que se había convertido en objeto de coleccionista.
Matemos al tío (1963), que fue llevada al cine con el mismo título en 1966 por el legendario director de películas de terror William Castle, y que está considerada una de las más importantes novelas góticas del siglo XX, un clásico de culto. Un título mítico también por la llegada de Edward Gorey que ahora Impedimenta recupera y que se había convertido en objeto de coleccionista.
Una lectura deliciosamente perversa.
Oscura y mortalmente ingeniosa, que junta la inocencia, la valentía, la
aventura, la ternura y el ingenio que solo se puede ver en personajes de la
edad de nuestros pequeños protagonistas y que de forma irónica choca con la
seriedad, la oscuridad y lo siniestro de su plan, Matemos
al tío es un clásico de culto que nunca hasta ahora se había publicado en
español y que se encarga de acercarnos la editorial Impedimenta.
¿Ilustraciones? ¿Qué ilustraciones? Sólo hay una.
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