Hoy quiero hablaros de una de mis escritoras favoritas, sus historias han ido evolucionando y cada vez me gustan más, sus obras anteriores “El futuro tiene tu nombre” y “Viento de otoño” ya me encantaron pero hoy con La rosa de Hereford creo que Brenna Watson ha ido un paso más allá y se ha superado a sí misma.
Vergara nos presenta una novela romántica histórica, nos llevará a la Inglaterra victoriana donde conoceremos a nuestros protagonistas.
Él es Nicholas Handcock un luchador en la guerra contra Napoleón que se ve obligado a volver a casa tras la muerte de su hermano y hacerse cargo del título familiar de Conde de Sedgwick.
Ella es Madeleine, una joven gobernada por una madre despótica, controladora que considera a su hija como un elemento para lograr su fin y ese fin será cazar a Nicholas, lo que les llevará a un matrimonio forzado.
Nicholas pensando que Madeleine le ha engañado la manda lejos, a Blackrose Manor, un hogar frio y desangelado, lejos de él, lejos de Londres.
Ya la tenía olvidada hasta que once años después en un baile el Rey requiere ver a su esposa, cosa que le llevará a ir a buscarla para contentar al Rey, lo que no espera encontrarse es a una mujer completamente diferente, fuerte, independiente, capaz de luchar por lo que quiere y ya no es la niña asustada que conoció.
A partir de ese momento la relación entre ellos empezará con muy mal pie, pero el tiempo pone las cosas en su lugar y Nicholas descubrirá su gran error y Madeleine que está cerrada al amor descubrirá que a veces los sentimientos no se pueden gobernar.
Me gusta mucho la evolución de los protagonistas y la importancia que le da la autora a la evolución de Madeleine, sus descripciones detalladas que esconden un gran trabajo de investigación y documentación, la creación de los personajes tanto principales como secundarios como Julien, Jake y Eliot e incluso de un personaje que no os desvelaré que se merece un argggggggg…. No diré más.
La historia es narrada a dos voces, cada protagonista nos presentará su manera de ver las cosas y de sentirlas, un hecho que nos hace muy fácil empatizar con ellos sobre todo con el corazón bondadoso de Madeleine y el cambio de Nicholas.
Poco más os voy a contar aunque me gustaría explicaros aquellos detalles que a mí me han parecido maravillosos, así que solo os puedo dar el consejo de que la leáis, no la dejéis escapar.
Os dejo una idea de la contraportada: “¿Puede el amor nacer entre las cenizas del rencor? ¿Y el tiempo curar las heridas del despecho?”
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