dijous, 1 d’agost del 2013

Una tienda en Paris



Por Àngela Sánchez Vicente



Tras su éxito con las novelas “Que sea la última vez que me llamas la reina de la tele” y “El susurro de la caracola”, Maxim Huerta nos vuelve a llenar de esperanza, alegría y llantos con su última novela Una tienda en Paris

Nos transporta al París de los felices años veinte de la mano de dos mujeres maravillosas, sensibles y soñadoras, parece mentira que un autor masculino narre tan bien y con tanta sensibilidad desde la voz y el punto de vista femenino. 

¿Alguna vez has pensado empezar de cero en otra ciudad? Fue entonces cuando todo cambió. Justo al acercarme a aquel viejo cartel de madera escrito en francés que vendían en un anticuario improvisado de Madrid. Aux tissus des Vosges, Alice HUMBERT, nouveautés.
Entré sin decir nada. Tenía la mirada perdida del que logra lo que quiere. En pocos segundos presentí un vuelco y una irreprimible necesidad de cambiar de vida. Traducido quería decir: Tejidos de los Vosgos, Alice Humbert, novedades. Significaba más, mucho más... 

Con una pluma irresistible, veloz e incansable nos ofrece unes vivencias irresistibles y arrebatadoras.

Es una novela conmovedora, sensible y terriblemente sentimental que te hará soñar. Sin ser cursi es un libro que tiene el aroma del viejo Paris, de las divas que gastaban el perfume más caro mientras éste se entrelazaba con el humo de los puros más genuinamente masculinos y varoniles.

Reconozco ser fan del escritor y de la persona, se puede intuir su esencia y sus raíces en los personajes y en las situaciones. 

Un chico sencillo del que me enamoré con “El susurro de la caracola”, parecía un libro hecho para mí en el momento en el que lo leí. Sabe transmitir mil emociones con una sola palabra y su bondad y gentileza hacen que se te estremezca la piel.

Una novela vital, sabe darle la vuelta a las situaciones opresivas que viven los personajes y sus protagonistas para transformarlo en un grito de fe y esperanza a la vez que convertirlo en un canto a la vida.

Una novela positiva y que va más allá, cada vez se supera a sí mismo y nos regala dosis de renacimiento,  una lección para creer en la fuerza del amor y de uno mismo. 

Creer en los sueños es el eje central de sus novelas, Nuevos principios que te llevaran a conocerte, un viaje introspectivo de la mano del mejor guía.

Planeta nos ofrece la posibilidad de viajar a Paris sin pagar ningún viaje, una alternativa muy positiva en época de crisis y vacaciones.

Al estar tan bien ambientada es imposible no sentirte en las tortuosas y estrechas calles que describe o sentir la calidez de los personajes desprende.

Espero que este no sea el último libro de Maxim, pues como el dicho popular “uno al año no hace daño”, más bien todo lo contrario, sus novelas son curativas para el alma.